Fue en 1979 cuando la Dirección General de Tráfico (DGT) estableció la obligatoriedad de un distintivo con fondo verde y una gran letra L blanca para los conductores que obtenían su permiso de circulación. Este cartel debía colocarse en la parte trasera de los vehículos de quienes acababan de obtener su carnet.
Hoy en día, esta norma sigue vigente para los nuevos conductores, aunque se han introducido algunas modificaciones desde entonces. Una de las más relevantes es que ya no existe una velocidad máxima específica de 80 km/h para quienes llevan esta señal. Actualmente, pueden circular a la velocidad permitida por la vía como cualquier otro conductor.
Más información
El uso de la señal V-13 —nombre técnico de la conocida L— sigue siendo obligatorio durante el primer año tras aprobar el examen práctico. Sin embargo, hay una medida adicional que se aplica durante los dos primeros años desde la obtención del carnet de conducir.
Esta medida hace referencia a la tasa máxima de alcohol permitida: los conductores noveles no pueden superar los 0,15 miligramos por litro de aire espirado, mientras que los conductores con más experiencia tienen un límite de 0,25 miligramos. Una diferencia importante que conviene tener muy presente. Volviendo a la placa de la L, ¿qué pasa con las motos?

La señal V-13 en motos
Aunque es extraño encontrar motocicletas o escúteres con el distintivo de la L, lo cierto es que es tan obligatorio portarlo como en los automóviles. Esta norma también incluye a los vehículos para personas con movilidad reducida y a los de tres ruedas.
Esta obligación de llevar la señal V-13 se limita a si el carnet de moto es el primer permiso para conducir un vehículo. Además, si se hubieran obtenido el carnet de coche y de moto a la vez, también habría que llevar la L en ambos vehículos.
Por el contario, si ya se cuenta con el carnet de coche y se quiere empezar a conducir una moto, no existe la obligación de colocar la señal. Por otra parte, se pueden conducir motocicletas con el permiso B, el de coche. Pero, para ello, hay que contar con tres años de antigüedad y el carné tiene validez para motos de hasta 125cc de cilindrada y 11 kW de potencia.

Medidas del distintivo
La señal V-13 se le entrega al alumno en la autoescuela tras aprobar el carné, aunque también se puede comprar en ciertos comercios en la red o en tiendas especializadas. Si se opta por esta segunda opción debe cumplir el Reglamento General de Vehículos:
- Anchura de la placa: 100 milímetros
- Altura de la placa: 130 milímetros
- Altura de la letra L: 100 milímetros
- Anchura de la letra L: 70 milímetros
- Anchura del trazo de la letra L: 20 milímetros
La placa debe estar fabricada en aluminio o en un material equivalente y la superficie reflectante tiene que contar con un reborde redondeado de color blanco mate.
Dónde colocar la placa V-13
La DGT incide en que tanto en las motos como en los vehículos de movilidad reducida y en los de tres ruedas, la señal V-13 con la L debe estar dispuesta en un lugar perceptible en la parte trasera.
Para su instalación en las motos y escúteres, la mejor solución es acudir al taller del concesionario donde se ha adquirido la moto. La zona de ubicación dependerá del modelo, aunque los más comunes son: en el lado izquierdo de la matrícula, debajo de ella, encima del grupo óptico posterior o tras el respaldo del asiento del acompañante.

Multas
Incumplir con la obligatoriedad de llevar la L en la moto supone una multa en estos casos:
- Circular sin ella durante el plazo de un año que establece la normativa.
- Colocarla de tal forma que no cumpla con lo que refleja el Reglamento General de Vehículos.
- Llevarla una vez finalizado el periodo de un año fijado para conductores noveles.
Estas infracciones no restan puntos del carné de conducir, pero sí conllevan una sanción económica de 100 euros.

Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram